Una de las zonas de mayor plusvalía en el Valle de México tiene como origen la tragedia patrimonial de una familia, que se combina con enredos registrales que hacen dudar sobre la certeza de quienes hoy son dueños de esa tierra.
En México la tenencia de la tierra suele ser tan volátil, que desencadena litigios como el vivido en los terrenos de la ex Hacienda de Jesús del Monte.
Conflicto que en distintos momentos ha llamado la atención de la opinión pública, y donde no existe certeza ni en la extensión de las tierras en disputa.
En esta batalla legal los herederos de la ex Hacienda de Jesús del Monte buscaban la titularidad de una poligonal de 4 mil 588 hectáreas, donde actualmente se ubican polos de desarrollo como Interlomas, Tecamachalco, y la Universidad Anáhuac en el Municipio de Huixquilucan.
El litigio se ha prolongado por dos décadas, mientras tanto ha continuado la urbanización de la citada poligonal que se extiende de Huixquilucan, en el Estado de México, a Cuajimalpa, en el Distrito Federal.
Los herederos descienden de Beatriz González de Muciño, quien de acuerdo con la escritura 159 de 1900, fue a su vez una de las herederas de la ex Hacienda de Jesús del Monte, propiedad cuyos antecedentes registrales datan de 1783.
Al fallecer González de Muciño sus hijas Vicenta e Isabel iniciaron el juicio intestamentario, que culminó en 1972 al ser reconocidos sus derechos hereditarios, quedando como albacea la primera de ellas.
Sin embargo, no quedó precisado qué fracción de terreno, de la citada poligonal, correspondía a cada heredera, lo cual agravó la invasión de predios y la aparición de supuestos propietarios que comenzaron con la venta de las propiedades.
Mario Díaz, en su momento apoderado legal de los herederos de Vicenta Muciño González, señaló que el despojo fue detonado por la intervención de Sergio Mena, de la empresa Molino Viejo, quien con engaños se fue apropiando ilegalmente de los derechos sucesorios de las dos herederas de Beatriz González de Muciño.
Mena entró a escena porque uno de los hijos de Vicenta Muciño le pidió asesoría legal para concluir el juicio sucesorio de González de Muciño.
El presunto despojo comenzó en 1992, cuando supuestamente Vicenta Muciño González firmó una cesión de derechos hereditarios para favorecer a la empresa Molino Viejo, documento que ha sido impugnado en posteriores juicios por la dudosa validez de dicha rúbrica.
Roberto Moyano, quien a la fecha pelea por la posesión de 10 mil metros cuadrados en el Fraccionamiento Hacienda de las Palmas, perteneciente a su vez a dicha poligonal; indicó que en el citado documento se falsificó la firma de Vicenta Muciño González.
“Mena se amparó en una cesión de derechos de Vicenta Muciño, hija de Beatriz, documento en el cual se falsificó la firma de Vicenta”, expresó.
Adicionalmente dicho documento establecía que debía ser ratificado ante alguna autoridad judicial o Notario Público, lo cual tampoco ocurrió, indicó Moyano.
Por separado, Díaz afirmó que los legítimos herederos nunca han vendido un metro de tierra, por lo cual todos los contratos de compra venta han sido ilegales, y por ende, los actuales residentes de la poligonal viven sobre tierras que no tienen certeza jurídica.
“Es el fraude más grande de la historia respecto a tierras, compraron terrenos en litigio, no podían ser vendidos, que ellos no sepan de esta situación no los exime de responsabilidad, puesto que si alguien va a comprar una propiedad tiene la obligación de investigar”, afirmó.
Por otra vía, los descendientes de Isabel Muciño González, quien fue la otra heredera de la ex Hacienda de Jesús del Monte, estimaron que aún pueden recuperarse alrededor de 100 hectáreas de la poligonal.
Información del Instituto de la Función Registral del Estado de México indica que en la cesión de derechos a Molino Viejo también existió un posible conflicto de interés.
A la fecha ya falleció Sergio Mena, y el titular de sus derechos es Rodolfo Bastida, conocido en el municipio de Huixquilucan porque se ostenta como albacea de Beatriz González de Muciño, lo cual ha generado litigios de tierras con inmobiliarias, como ocurrió en la década anterior, cuando se desataron una serie de acusaciones mediáticas y que incluso provocaron la intervención directa de la Presidencia de la República.
En este litigio los abogados de Bastida refieren una pregunta que les hacen a los herederos de la ex Hacienda de Jesús del Monte; interrogante que da certeza a sus argumentos, pero recuerda el inicio de todo el enredo: “¿cómo van a acreditar que tienen derecho en la sucesión de Beatriz González de Muciño?”.
Adicionalmente aclaran que el predio en disputa realmente es de 956 hectáreas, y no de 4 mil 588 hectáreas como señalan los herederos de la ex Hacienda de Jesús del Monte, quienes obtuvieron tal extensión producto de la verificación histórica de los límites asentados en la escritura de 1900.
En su versión Bastida también afirmó que en 1992 Vicenta Muciño González vendió sus derechos de la ex Hacienda de Jesús del Monte a la empresa Molino Viejo, y tras la denuncia de sus herederos se ratificó que no fue falsificada la firma de Muciño González.
Límites
De acuerdo a sus herederos la propiedad de Beatriz González de Muciño abarcó una extensión de 4 mil 588 hectáreas, y estas son sus colindancias según la escritura de 1900, entre paréntesis se refieren puntos de referencia actuales:
Al norte: Desde el punto llamado “Molino Viejo” (El Yaqui) hasta “La Peñita” (pueblo de Tecamachalco o Presa El Capulín); de “La Peñita” hasta la punta de la “Loma del Coyote” (Bosque Real)
Al sur: Desde el punto “La Cabrera” (camino a Cuajimalpa, límites de Cuajimalpa y Huixquilucan) hasta punta de Tlaxcantitla (pueblo de Tecamachalco)
Al oriente: Desde punta de Tlaxcantitla (Pueblo de Tecamachalco) hasta punta de la “Loma del Coyote” (Bosque Real)
Al poniente: Desde el pueblo de Santiaguito hasta “Molino Viejo” (El Yaqui), río de por medio.
Fuente: Herederos de la ex Hacienda de Jesús del Monte.
“Compra” problemas
Comprar predios en los terrenos de la ex Hacienda de Jesús del Monte puede derivar en largos litigios por la posesión de la tierra, como lo ha vivido en carne propia Roberto Moyano.
Este ciudadano denunció que en 1994 compró 10 mil metros cuadrados en lo que hoy es el fraccionamiento Hacienda de las Palmas, específicamente en la Avenida del Ciervo, lotes 33 y 34.
Aunque afirma haber comprado a los legítimos herederos de la ex Hacienda de Jesús del Monte, sobre su propiedad se comenzaron a construir condominios.
Al comenzar el litigio, al tratar de recuperar lo que había comprado, Moyano descubrió que existía otro supuesto dueño de ese predio, además no había certeza sobre el origen de los terrenos donde se construyó el fraccionamiento Hacienda de las Palmas.
En su investigación, el ciudadano detectó que esas tierras tenían como antecedente una extraña fusión efectuada en 1991.
Dicha fusión involucró a los predios Loma del Coyote, El Salitrero, y Lote 224, aún cuando los dos primeros estarían ubicados físicamente en otro lugar y sus colindancias no coinciden.
La operación fue orquestada por inmobiliarias que estuvieron representadas por Constructora Profusa, quienes compraron dichos predios a terceros, es decir, a personas que no eran los legítimos herederos de la ex Hacienda de Jesús del Monte.
El enredo no paró ahí, pues un convenio judicial de transacción, signado en 1996, indica que las inmobiliarias pagaron 1.2 millones de pesos a Sergio Mena, quien para entonces se ostentaba como albacea de la sucesión de Beatriz González de Muciño.
Esto aunque las inmobiliarias ya habían adquirido y pagado, al menos en el papel, los citados predios a los supuestos dueños.
“La sucesión de la Sra. Beatriz González Vda. Muciño, por conducto de sus representantes y después de analizar la trayectoria registral de los títulos de propiedad tanto de los predios de Inmobiliaria Bosques de Apaxco (…)
“Manifiesta que reconoce para todos los efectos legales a que haya lugar que dichas empresas son las propietarias de los inmuebles que respectivamente tienen escriturados a su favor”, indica el convenio judicial.
Para acreditar su personalidad jurídica Mena presentó, en dicho convenio, la cesión de derechos sucesorios que presuntamente firmó Vicenta Muciño en marzo de 1992.
Para rematar la confusión patrimonial, en 2005 Panorámica San Carlos compró a Constructora Profusa, Inmobiliaria Bosques de Apaxco, y Bosques de las Lomas, el lote 33 del fraccionamiento Hacienda de las Palmas.
A su vez David Unzek y otros compraron a las mismas inmobiliarias el lote 34. A la fecha Moyano continúa exigiendo una indemnización por el despojo del que acusa fue objeto.
Cronología
Esta es parte de la historia del enredo patrimonial de la ex Hacienda de Jesús del Monte:
1990
Vicenta Muciño González, por recomendación de su hijo Enrique Flores Muciño, acude al despacho de Sergio Mena Aguilar para regularizar la herencia de su madre Beatriz González de Muciño.
1992
Sergio Mena Aguilar, Ángel Eduardo Díaz Ahedo, y Enrique Flores Muciño (hijo de Vicenta Muciño González), son identificados como autores de un documento de cesión de derechos hereditariosde Vicenta Muciño González a la empresa “Molino Viejo”, que se crea de forma paralela.
En el mismo año los sucesores de Isabel Muciño González venden, mediante supuestos engaños, sus derechos hereditarios a Sergio Mena Aguilar.
1993
La firma de la cesión de derechos de Vicenta Muciño González no coincide con la estampada en su respectivo testamento.
Todos los actos posteriores son combatidos por los legítimos herederos de Vicenta Muciño González.
1994-1996
Molino Viejo adquiere el control de las sucesiones de Vicenta e Isabel Muciño González, con lo cual se realizan ventas de inmuebles, reconocimiento de ventas, nombramientos de apoderados, y contratos de transacción con desarrolladores inmobiliarios.
2006
Fallece Sergio Mena Aguilary su sucesión María Cristina Mendoza del Rio y Leonardo Mena Mendoza ceden sus derechos hereditarios que les correspondían de Isabel Muciño González a Rodolfo Bastida Marín y Víctor Mena Aguilar.
También ceden sus derechos de Vicenta Muciño González a Rodolfo Bastada Marín.