Tras varios días de tensión entre la Universidad Autónoma del Estado de México (UAEM) y la Legislatura mexiquense, finalmente Victorino Barrios Dávalos fue presentado por el rector Alfredo Barrera Baca como nuevo titular del órgano interno de control de la máxima casa de estudios de la entidad.
Entre los retos que enfrentará Barrios Dávalos como titular de este órgano se encuentra el fiscalizar los recursos públicos. Destaca el esclarecer las acusaciones que señalan a la UAEM como parte de un esquema de desvío de recursos, descritos en la investigación periodística de La Estafa Maestra.
A continuación, te presentamos una breve recapitulación de esos señalamientos presentados en el citado reportaje periodístico:
Empresas fantasma
En 2013 el Fondo de Fomento y Desarrollo de la Investigación Científica y Tecnológica (Fondict) de la UAEM entregó dos contratos por 4 millones 934 mil pesos a la empresa Publicidad y Mercadotecnia Infinitum.
La contratación fue para dar “servicios administrativos para el desarrollo del sistema informático” de la Secretaría de Comunicaciones y Transportes. Pero el SAT la tiene catalogada desde julio del 2014 como empresa fantasma por presuntamente realizar operaciones fraudulentas.
Fondict otorgó en 2013 otro contrato por 17 millones 578 mil pesos a la empresa Impactel, aun cuando ésta ya tenía una investigación abierta por la entonces Procuraduría General de la República, pues un año antes había incumplido un contrato con el Consejo Nacional para la Cultura y las Artes por 68 millones de pesos.
Dinero de los trabajadores
La UAEM recibió 223 millones 87 mil pesos del Fondo de Vivienda del ISSSTE por cinco convenios para “rediseñar o simplificar los procesos de atención a derechohabientes”.
Sin embargo, la universidad no tenía la capacidad de dar el servicio, así que contrató a Interamericana de Negocios y Comercio, que en realidad se dedica –según su acta constitutiva- a la venta de zapatos. A esta empresa le dio 15 millones 389 mil pesos.
Analfabetas
El Instituto Nacional para la Educación de los Adultos (INEA) firmó un convenio en 2014 con la UAEM por 97 millones de pesos. El instituto contrató a la universidad para desarrollar una metodología que permitiera la “ubicación de personas de 15 años o más de edad que no supieran leer y escribir un recado en español”.
La UAEM se declaró incapaz de hacer la totalidad del servicio y subcontrató a Estrategia Solutions, que ganó 9 millones 558 mil pesos. Además de no estar registrada ante la Secretaría de Economía, en la visita a su domicilio fiscal, trabajadores confirmaron que la empresa no opera ahí, pero cada determinado tiempo acude una persona a recoger correspondencia.
Del resto de dinero -87 millones de pesos- no se sabe nada.
Otro ejemplo, en 2013 la Secretaría de Bienestar (antes Secretaría de Desarrollo Social) firmó un convenio por 159 millones de pesos con tres objetivos: organizar un concierto, entregar despensas y realizar una feria con organizaciones de la sociedad civil.
La UAEM contrató a S&C Constructores de Sistemas por 75 millones de pesos. Esta empresa organizó en abril de 2013, en la Ciudad de México, el concierto “Compartamos música, erradiquemos el hambre” de la Cruzada contra el Hambre.
S&C Constructores de Sistemas se quedó con 61 millones y le entregó 14 millones a una empresa llamada ESGER, aunque la Auditoría Superior de la Federación (ASF), determinó que no existe evidencia de que ésta última haya participado en la organización del evento.
Todos los convenios que firmó Sedesol con la Universidad Autónoma del Estado de México derivaron en distintas operaciones que son cuestionadas.
Con el actual gobernador
El ahora gobernador Estado de México, Alfredo del Mazo Maza, estaba al frente del Banco Nacional de Obras y Servicios Públicos (Banobras) en 2013, cuando el organismo firmó tres convenios por 491 millones de pesos con el Fondo de Fomento a la Investigación Científica y Tecnológica (Fondict) de la UAEM, el cual es un fideicomiso público que ofrece asesorías, outsourcing o capacitación, y cuya gestión es independiente de la Universidad.
Para hacer los servicios “de control, operación y soporte” de la red interna de Banobras, el Fondo contrató a dos empresas, una de ellas Intellego Servicios de Consultoria que cobró una comisión y que a su vez contrató a cinco más. Todas, excepto una, tienen una constante: irregularidades –como que no tienen ni siquiera dirección fiscal- que les impedirían recibir contratos públicos de manera directa.
Hasta aquí parte de los datos contenidos en el reportaje de La Estafa Maestra.
REACCIÓN
En la réplica a los señalamientos que involucran al exrector de la Universidad Autónoma del Estado de México (2013-2017), Jorge Olvera García, y actual presidente de la Comisión de Derechos Humanos de la entidad (Codhem), éste se deslindó de cualquier acusación o señalamiento sobre la Estafa Maestra, argumentando que en su gestión únicamente le dieron seguimiento a los acuerdos signados años atrás.
Para dar seguimiento a este tema un ciudadano del Estado de México presentó una solicitud de información pública ante la UAEM para conocer los contratos implicados en el reportaje de La Estafa Maestra, cuyo expediente compartió con metricadigital.com.
Ante esta petición, la UAEM negó la información, pese a que el ciudadano se inconformó ante el Instituto de Acceso a la Información de la entidad (Infoem). La negativa final ocurrió durante 2020.
Para justificar su negativa la universidad estatal esgrimió el acuerdo UAEM/CI/CIR/001/2020 de su Comité de Transparencia, mediante el cual clasificó dicha información como reservada, argumentando que no pueden compartir los contratos signados por la UAEM con la Secretaría de Desarrollo Social y la Secretaría de Desarrollo Territorial y Urbano (Sedatu), debido a que éstos se encuentran en proceso de auditoría por parte de la Auditoría Superior de la Federación (ASF), órgano auditor que tiene clasificada dicha información como reservada.
Dicho documento también señala que a solicitud del servidor público universitario, Erick Herzain Torres Mulhia, del Fondo de Fomento y Desarrollo de la Investigación Científica y Tecnológica de la UAEM, se solicitó al Comité de Transparencia de la universidad aprobar la clasificación de la información relativa a los contratos señalados en La Estafa Maestra, como información reservada.
Dichos contratos van del periodo de enero de 2013 al 31 de diciembre de 2015.
La información del reportaje de La Estafa Maestra corresponde a lo publicado en la siguiente liga: https://www.animalpolitico.com/estafa-maestra/